La locución (...) proviene de una tradición de la antigua Universidad de Salamanca, en la que los doctorandos, el día antes de defender su tesis ante el tribunal, debían encerrarse durante un día entero en la capilla de Santa Bárbara de la vieja catedral salmantina para pedir la iluminación al Espíritu Santo. Allí debían prepararse en completa soledad, pues incluso la comida les era pasada por un pequeño ventanuco. (...) Entraba el tribunal examinador ante el que se debía mantener la tesis, resistiendo sus trincas o preguntas. Si el doctorando aprobaba, era sacado por la puerta principal de la capilla, de ahí la procedencia de otra locución, “salir por la puerta grande”, de donde la tomó la jerga taurina como apoteosis del triunfo. Si el doctorando suspendía, debía salir por una puerta pequeña que daba a la calle de los carros, de ahí el origen de una nueva locución, “salir por la puerta de los carros”, como sinónimo de fracasar. Tras ser sacado en hombros por sus amigos, al doctorando exitoso se le imponían el víctor, las ropas y el nombre de doctor, tras lo cual debía invitar al tribunal y al bedel a una comida. Como remate, ponían en los muros de la catedral un víctor con letras rojas y el nombre del nuevo doctor en negro. Aunque es opinión que esta antigua tradición universitaria es el origen del dicho "estar en capilla", hay autores que afirman que bien pudo ser el hecho de que Felipe II ordenó que todos los reos condenados a muerte debían pasar la noche anterior en una capilla, desde donde, tras confesar, oir misa y comulgar, se encaminaban a su ejecución y que nadie debía ser ejecutado sin cumplir la orden de pasar la noche antes orando en la capilla.
CÓMO MEJORAR ESTE MUNDO
-
• Huyendo de los dictadores, tanto blandos, si es que los hay, como
sanguinarios, la inmensa mayoría, de los salvapatrias y vendehumos, del
populismo...
Hace 6 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario